Después de varios años trabajando en marketing online, como gestora de una tienda online de calzado y moda y como consultora SEO para posicionar adecuadamente una página web en los resultados naturales de Google, en el último año el algoritmo de este buscador ha sido alterado varias veces, con lo que debemos de revisar si nuestras estrategias SEO son todavía válidas.
Como otros consultores, se han estado utilizado una serie de prácticas SEO básicas muy orientadas al buscador, ya que hasta ahora lo que buscaba nuestro cliente eran visitas y clics, cuanto más arriba más probabilidad de captar más tráfico en la web. Y para que éste nos mostrara entre los principales resultados de búsqueda, debía añadirnos correctamente en su índice como expliqué en mi anterior post sobre SEO, por lo era vital la elección y uso de palabras clave.
¿Cómo debo optimizar On-Page mi web?
Según nos explica Rand Fishkin en uno de sus WhiteBoardFriday de SEOMoz, debemos tomar parte en la intención del usuario cuando realiza una búsqueda y ofrecer la respuesta que espera a su consulta en Internet. Ya no es significativo tener mucho tráfico en la página, si luego nuestro nuestra visita no se convierte en cliente. Por esta razón utilizar las clásicas prácticas de optimización On-Page alrededor del uso de palabras clave ha dejado de ser tan vital puesto que a partir de ahora hacer que nuestro resultado en la búsqueda destaque por si mismo puede aportarnos tráfico de calidad en nuestro sitio.
Para eso es recomendable optimizar nuestra página web con los nuevos meta datos, siguiendo las indicaciones de Schema.org, incluso implementando la etiqueta rel=author, archivos de vídeos XML. Para Google, tener un perfil de empresa en Google Plus for Business con la integración de Google Photos for Business, además de Google Maps, también nos hará aparecer puestos muy destacados para búsquedas locales.
Factores como el tiempo de descarga de la página, el tiempo también que el usuario interactua con nuestros contenidos y permanece en nuestra web deben de ser monitorizados también si lo que buscamos es una mayor implicación del usuario en nuestro producto, más que el número de visitas y páginas vista. Crear una responsive web, es decir, un diseño adaptado para que los usuarios de smartphones y tablets también puedan navegar por nuestra página pudiendo saltar de una sección a otra y visualizar bien todos los contenidos es otra estrategia básica ya de optimización On-Page de nuestro site.
Finalmente ser conscientes que nuestro contenido va a ser compartido en Redes Sociales, y debe estar optimizado para que pueda ser disfrutado también desde este tipo de plataformas. Por lo que debemos tener en cuenta que las imágenes de nuestros posts deben de caber en el timeline de Facebook, las imágenes que compartimos en Pinterest deben tener la óptima calidad, que podemos utilizar etiquetas para aparecer entre los tweets de Twitter, etc.